
Montero, Santa Cruz. — En una extensa entrevista con Wara Comunicaciones, la reconocida dirigente y activista de derechos humanos Adela Ortiz Céspedes, montereña “de pura cepa”, compartió su visión sobre la situación actual del municipio, el rol del control social y los desafíos que enfrenta la ciudad en materia de gestión pública, seguridad y derechos ciudadanos.
Ortiz recordó sus inicios como representante del antiguo Comité de Vigilancia, antes de la creación del actual Control Social, y expresó su preocupación por el retroceso en la participación ciudadana.
“Sinceramente, se ha estancado. No se está aplicando la Ley 341 de Control Social. Ya no se fiscaliza ni se controlan los recursos en los barrios. Tal vez falta conocimiento o empoderamiento, pero ya no hay ese seguimiento que antes teníamos”, señaló.
La activista explicó que muchas veces quienes asumen cargos vecinales no cuentan con la preparación necesaria o pierden la motivación al ser funciones ad honorem.
“Este trabajo exige vocación de servicio. Sin eso, es difícil avanzar”, añadió.
Ocho años al servicio de los derechos humanos
Adela Ortiz lleva más de ocho años trabajando como delegada del Observatorio de Derechos Humanos y Justicia, institución dirigida por el Dr. Cuéllar. Desde este espacio, ha impulsado gestiones en favor de los sectores más vulnerables: niñez, adolescencia, mujeres, personas mayores y privados de libertad.
“El 85% de los internos en nuestro país están con detención preventiva. Nosotros hemos trabajado para mejorar sus condiciones, y recientemente el CEA ‘Carlos Villegas’ cumplió siete años de funcionamiento dentro del penal. Hemos hecho mucho, dentro y fuera de la cárcel”, resaltó.
“No está en mis planes candidatear”
Consultada sobre su posible participación en las elecciones subnacionales de 2026, Ortiz aclaró que no está en sus planes postular a ningún cargo, pese a las invitaciones recibidas.
“Por ahora estoy dedicada a trabajar en derechos humanos. Hay demasiados problemas en Montero: inseguridad, violencia, tráfico de drogas, deficiencias en salud, y un banco de sangre que apenas funciona al 50%. En eso estamos enfocados”, explicó.
Crítica a la gestión municipal actual
En la parte más contundente de la entrevista, Adela Ortiz no dudó en cuestionar duramente la gestión del actual alcalde Regys Medina y del Concejo Municipal.
“Esta gestión se ha caracterizado por ser de autoridades flojas e incapaces. No hay obras, no hay avances. Hemos retrocedido. Lo único que han hecho es remodelar plazas y rotondas, pero lo que necesitamos es fortalecer salud y educación”, denunció.
Incluso relató que, desde la sociedad civil, han tenido que donar pupitres y material deportivo a las escuelas, tareas que —afirmó— deberían ser asumidas por el municipio.
“Hay funcionarios con ganas de trabajar, pero la cabeza, el alcalde, no les da condiciones. Por eso digo claramente: tenemos un desastre de gobierno municipal”, sentenció.
Una mujer de lucha y compromiso
Adela Ortiz finalizó la entrevista con un mensaje de esperanza y servicio hacia su pueblo:
“Montero necesita gente con vocación, con amor por su ciudad. No podemos seguir mirando desde el balcón mientras los problemas crecen. Hay que actuar”, concluyó.
