En un encuentro con vecinos y representantes de distintos sectores sociales, Maico Moreno —quien anteriormente fue candidato a diputado y ocupó cargos en la función pública— llamó a conformar una amplia alianza ciudadana con miras a impulsar un “cambio real” en el municipio de Montero. El orador sostuvo que la población demanda “gente honesta, con principios y valores”, capaz de representar por igual a distritos urbanos, barrios periféricos, comerciantes, gremialistas, transportistas, profesionales y jóvenes.
Durante su intervención, presentó a varias personas que lo acompañan en su proyecto, entre ellas a la señora Matilde, colaboradora de años, y al profesor Vivero, director del Colegio Fe y Alegría y exdirigente cívico y gremial. También mencionó a la ciudadana Aranza Barba y a otros representantes que asistieron al acto, destacando que ninguno proviene de estructuras políticas tradicionales.
Críticas al manejo de recursos municipales
El dirigente cuestionó la administración de los recursos públicos del Gobierno Autónomo Municipal de Montero. Señaló que la alcaldía maneja un promedio de 200 millones de bolivianos anuales, lo que suma aproximadamente 1.000 millones en cinco años, sin contar recursos adicionales provenientes del Gobierno central o la Gobernación.
“¿Ustedes han visto en estos últimos cinco años invertidos 1.000 millones de bolivianos en Montero?”, preguntó a la audiencia, sosteniendo que gran parte del presupuesto se destina a sueldos, consultorías y contrataciones que —según indicó— no responden a una planificación técnica ni a las prioridades de los barrios.
Desayuno escolar: retrasos y mala planificación
Uno de los puntos más criticados fue la gestión del desayuno escolar. Aseguró que la entrega suele iniciar tarde y que cada año las licitaciones se tramitan con demoras que afectan a miles de estudiantes.
Expresó que el proceso debería planificarse desde enero para que el alimento llegue el primer día de clases, pero que la realidad muestra convocatorias tardías y adjudicaciones lentas. “Con hambre no se aprende”, señaló al enfatizar que muchos estudiantes dependen del desayuno complementario para rendir adecuadamente.
Moreno lamentó que incluso en la actual gestión se estaría licitando casi al cierre del año escolar, poniendo en riesgo la entrega efectiva del servicio.
Cuestionamientos a la fiscalización y funcionamiento del Concejo Municipal
Durante su discurso también criticó el rol del Concejo Municipal, afirmando que la fiscalización es prácticamente inexistente.
Señaló que, pese a existir 11 concejales y 11 suplentes, “no se los ve en los barrios ni verificando la situación de los centros médicos”. Aseguró que los hospitales y establecimientos de salud carecen de medicamentos, y que cuando se realizan entregas públicas desde la municipalidad estas consisten principalmente en materiales administrativos, sin resolver las necesidades urgentes de equipamiento o abastecimiento.
Propuesta: un proyecto plural y participativo
Moreno insistió en que su objetivo es construir una propuesta colectiva, elaborada desde las necesidades reales de cada sector. Invitó a gremialistas, transportistas, profesionales, estudiantes y vecinos en general a ser parte del diseño de proyectos y planes municipales.
La idea central —explicó— es conformar un equipo que trascienda los colores políticos y que priorice el interés común. “Los partidos muchas veces tienen sus propios intereses; nosotros queremos que el interés sea colectivo”, afirmó.
Recalcó que una verdadera transformación municipal exige la participación de todos los sectores y representantes legítimos que puedan llegar al Concejo Municipal y ejercer fiscalización efectiva.
Llamado final a la unidad
Concluyó su alocución destacando que para ganar la alcaldía en 2026 será necesario conformar una alianza amplia y diversa. “Queremos un blanco, un morenito, un alto, un bajito, un gremialista, un profesional, un mototaxista. Queremos la unidad de Montero”, afirmó ante los asistentes, pidiendo continuar sumando voluntades para un eventual proyecto electoral municipal.
